Las estufas de exterior por infrarrojos son un tipo de estufas eléctricas que proporcionan un calor inmediato y que no contamina nada.
El calor por infrarrojos es uno de los más sanos y aumenta la temperatura del cuerpo y de los objetos de manera rápida sin que resulte perjudicial para los mismos.
La instalación de las estufas exteriores por infrarrojos es muy sencilla, basta con conectarla a la toma de una corriente. Esto hace que sean ideales para realizar una climatización rápida en espacios abiertos.
¿Cómo funcionan las estufas por infrarrojos?
El calor por infrarrojos se transmite a través de unas ondas denominadas “ondas infrarrojas”, al contrario que con las estufas a gas, el calor no se transmite por el aire. Estas estufas también son conocidas como estufas de «calor radiante».
La mayoría de los modelos de calefactores infrarrojos existentes en el mercado disponen de mando a distancia lo que permite programarlas sin necesidad de realizar ninguna acción directa sobre la estufa.
Debido a ello, es habitual encontrar estufas infrarrojas o con calefacción radiante ubicadas en lo alto de los parasoles o colgadas en separadores o paredes a gran altura.
Ventajas y beneficios de la calefacción por infrarrojos
La gran ventaja y beneficio de la calefacción por infrarrojos es que es una de las formas más seguras de climatizar una terraza o un espacio exterior.
El tipo de calor que generan las estufas radiantes es muy controlable y no genera ningún tipo de incendio o quemadura. Además de ser un calor seguro, es beneficioso para los seres humanos ya que no supone ningún tipo de inconveniente para personas con problemas respiratorios.
A continuación, te proponemos las 6 mejores estufas de infrarrojos existentes en el mercado: